IUF logo; clicking here returns you to the home page.
UITA
Unificando los trabajadores agroalimentarios y de hostelería en todo el mundo


Organizaciones sindicales presentan una queja ante la OIT en el más reciente intento por hace liberar a los dirigentes sindicales detenidos en una cárcel secreta de Eritrea. Se han planeado otras acciones

Incluido en el sitio web de la UITA el 27-Sep-2005

Comparte este artículo con otras personas interesadas



El movimiento sindical internacional intensificó hoy la presión sobre el gobierno de Eritrea para conseguir la liberación de tres dirigentes sindicales detenidos en una cárcel secreta de Asmara sin que se les formularan cargos.

La UITA, la CIOSL y la FITTVC presentaron hoy una queja oficial contra el gobierno de Eritrea ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) de la ONU. En la queja, presentada conjuntamente ante el Comité de Libertad Sindical de la OIT, se dice que al detener a los sindicalistas Tewelde Ghebremedhin, Minase Andezion y Habtom Weldemicael, Eritrea está violando los convenios de la OIT.

Además, esas tres organizaciones internacionales juraron utilizar “todos los medios disponibles” para conseguir la rápida liberación de los dirigentes sindicales.

Se mantiene incomunicadas a esas tres personas, detenidas desde comienzos de la primavera, y no se les han formulado cargos, contrariamente a lo estipulado en la legislación eritrea, según la cual las personas arrestadas deben comparecer ante un magistrado dentro de un plazo de 48 horas. Se cree que están en una cárcel secreta de seguridad de Asmara.

“Además de la queja ante la OIT, estamos contemplando otros medios para ejercer presión sobre el gobierno a fin de que éste proceda a la inmediata e incondicional liberación de los dirigentes sindicales”, dijo Guy Ryder, Secretario General de la CIOSL.

En Eritrea hay varios proyectos de la UE para el período 2002-2007 financiados por el Fondo Europeo para el Desarrollo, por un valor de 156 millones de euros. Una parte importante de ese acuerdo indica que para recibir esa asistencia, el gobierno de Eritrea debe respetar los derechos humanos.

Ghebremedhin y Andezion fueron arrestados por la policía de seguridad el 30 de marzo. En el momento de su arresto, eran los dirigentes electos de la federación sindical nacional de trabajadores de la alimentación, la agricultura, el tabaco y el turismo (afiliada a la UITA) y de la federación de trabajadores del textil y el cuero (afiliada a la FITTVC) respectivamente. El 9 de abril, la policía arrestó a Habtom Weldemicael, dirigente del sindicato de la embotelladora de Coca Cola del Mar Rojo y miembro de la ejecutiva de la federación de trabajadores de alimentos y bebidas.

El gobierno no ha respondido a los reiterados reclamos internacionales de que liberara a los dirigentes sindicales y que diera a conocer las acusaciones que se les hacen.

“El hecho de que esas personas estén detenidas sin que se les formularan cargos y sin que hubieran podido consultar con abogados o ponerse en contacto con sus familias no solamente es un terrible abuso de sus derechos humanos fundamentales sino que también transgrede la legislación eritrea. Si en algo valora su reputación internacional, al gobierno de Eritrea le convendría liberar a esas personas”, dijo Neil Kearney, el Secretario General de la FITTVC.

Bajo su régimen de partido único, Eritrea se ha ido haciendo cada vez más represiva. Según Amnistía Internacional (que también ha instado a la acción en respaldo de los tres dirigentes sindicales detenidos), en las cárceles de Eritrea hay miles de personas contrarias al gobierno, algunas de ellas desde hace varios años.

Ninguno de los detenidos ha comparecido ante los tribunales ni se los ha acusado o juzgado. En algunos casos, se supo que paneles de militares y de funcionarios policiales dictaron condenas de cárcel secretamente, con lo que no se siguieron los procedimientos básicos de un juicio justo.

Según Amnistía, la utilización de tortura ha pasado a ser “sistemática”. Entre las personas actualmente detenidas sin un juicio adecuado hay ex dirigentes y militantes de la lucha por la liberación nacional, como así también ex ministros y periodistas.

“Esos arrestos implican que el círculo de represión ha pasado ahora a abarcar también el movimiento sindical. Las internacionales sindicales han advertido al gobierno de Eritrea que lo consideran responsable del bienestar físico y psicológico de los tres dirigentes sindicales”, dijo Ron Oswald, el Secretario General de la UITA.

En septiembre se cumple también el cuarto aniversario de la detención ilegal de Dawit Isaac, un periodista y ciudadano suizo. Dawit Isaac y otros 12 periodistas independientes fueron detenidos y están incomunicados -sin acusaciones ni juicio- desde septiembre de 2001, cuando el gobierno cerró los diarios independientes. No se sabe que se haya presentado ninguna acusación contra ninguno de ellos. La Federación Internacional de Periodistas procura entrevistarse con el Embajador de Eritrea ante la UE para reclamar su inmediata liberación.