Victoria Decisiva de Sindicato Coreano Femenino en Club Campestre de Propiedad Gubernamental

Incluido en el sitio web de la UITA el 09-Dec-2003

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El Korean Women's Trade Union (KWTU), afiliado a la UITA, ha conquistado una victoria capital en su lucha por los derechos de las muchas trabajadoras empleadas en los campos de golf del pa�s. En Corea, hay aproximadamente unos 20.000 portadores de palos de golf (caddies), la mayor�a de los cuales son mujeres. Debido a que su estado legal como trabajadores/as es ambiguo en la legislaci�n nacional, los propietarios de los campos de golf han utilizado esta ambig�edad para oponerse al reconocimiento de los sindicatos y la negociaci�n colectiva. Los/as portadores/as de palos no est�n cubiertos por seguros contra accidentes en el lugar de trabajo, a pesar de la alta tasa de accidentes y lesiones, en tanto que la mayor�a de los campos de golf prohiben que los/as caddies usen los lentes que podr�an protegerlos de lesiones en los ojos. Ellos/as no tienen protecci�n alguna contra los despidos injustos y el acoso sexual.

Hace dos a�os, el gobierno prometi� cambios en las pol�ticas a fin de garantizar los derechos de los/as portadores/as de palos de golf, pero los/as caddies todav�a est�n aguardando. Mientras tanto, los due�os de los campos de golf est�n tratando de desbaratar los sindicatos que se han formado.

El d�a 16 de octubre, 110 caddies femeninas --miembros del sector local del KWTU- fueron objeto de un cierre patronal en el Country Club 88, a unos 30 kil�metros del centro de Se�l. Ellas estaban luchando para renovar el convenio colectivo que hab�an logrado por primera vez en julio del 2001 luego de 18 meses de contienda. La gerencia del Club sostuvo que no ten�a obligaci�n alguna de hablar con el sindicato debido a que las caddies no son trabajadoras conforme a la definici�n de la Ley de Normas Laborales. A continuaci�n, la gerencia cerr� y expuls� a todas las afiliadas sindicales, a pesar del hecho que el convenio todav�a estaba en vigor. Se le cort� la electricidad a la oficina del sindicato y se les prohibi� a los miembros sindicales que entraran en el local.

El sindicato combati� con una serie de manifestaciones ante los portones del club. A partir del 5 de noviembre, los miembros sindicales comenzaron tambi�n a manifestar frente al Ministerio de Asuntos de los Patriotas y Ex Combatientes del gobierno de Corea, que es el propietario directo del Country Club 88. Ellas recibieron apoyo internacional en favor de su lucha cuando las afiliadas de la UITA de todo el mundo enviaron mensajes de protesta al Ministerio en respuesta a un llamado de la UITA.



Las afiliadas sindicales organizaron continuas manifestaciones ante el Ministerio de Asuntos de los Patriotas y Ex Combatientes para reclamar el cese a la represi�n sindical en el campo de golf de propiedad estatal y el respeto a los derechos sindicales.

Bajo la presi�n, la gerencia acord� negociar pero insisti� en insertar cl�usulas antisindicales discriminatorias en el convenio propuesto, tales como diferentes tareas de trabajo para las afiliadas sindicales y las no afiliadas. A pesar de las constantes manifestaciones sindicales ante el ministerio, el gobierno rehus� reunirse con la presidente del sindicato KWTU del Country Club 88 para discutir la situaci�n. El 25 de noviembre, 80 afiliadas sindicales que manifestaban frente al ministerio intentaron ingresar al edificio y reunirse con el ministro despu�s que el gerente del club entrara para mantener conversaciones directas con el ministro. Guardias anti-asalto les bloquearon el paso, pero la acci�n del sindicato logr� impulsar al gobierno para que finalmente interviniera con el fin de promover una soluci�n satisfactoria.

El 28 de noviembre, la gerencia tom� contacto con el sindicato para solicitar una reanudaci�n de las negociaciones colectivas. Las afiliadas sindicales regresaron al club, pero la gerencia s�lo convino en firmar tras una manifestaci�n ininterrumpida de brazos ca�dos que dur� hasta la noche del d�a 30 de noviembre.



La manifestaci�n, reunida durante tres d�as y dos noches, frente a la oficina del presidente del Country Club 88, finalmente indujo a la gerencia a firmar el convenio colectivo.


El nuevo convenio colectivo constituye el primero exitosamente renovado por un sindicato de caddies en Corea. Garantiza el derecho de las trabajadoras al reconocimiento y representaci�n del sindicato, contiene disposiciones relativas al acoso sexual por parte de los jugadores de golf y asegura la licencia por maternidad por 60 d�as y un d�a mensual de licencia por menstruaci�n, que la Ley de Normas Laborales garantiza para todas las trabajadoras pero que son frecuentemente negadas a las caddies de golf. El sindicato ha agradecido a la UITA y a sus afiliadas el apoyo y la solidaridad recibidos por sus miembros durante el curso de su dif�cil lucha.