Organizaciones sindicales de todo el mundo mostraron su solidaridad con la huelga general en Corea organizada por la KCTU el 30 de noviembre, entre ellos, más de 100 sindicalistas de organizaciones sindicales internacionales y nacionales que se manifestaron en Ginebra. La confederación sindical coreana exige que se ponga fin a la represión antisindical y la renuncia inmediata del presidente Park Guen-hye. Más de 200.000 miembros de KCTU participaron en la huelga.
El Secretario General de la UITA, Ron Oswald, acompañado (de izquierda a derecha) por Ambet Yuson y Valter Sanches, Secretarios Generales de ICM e IndustriALL.
Las federaciones sindicales internacionales con sede en Ginebra —la UITA, ICM, IndustriAll, PSI y Uni— se reunieron frente a las Naciones Unidas y marcharon hasta la Misión de Corea para entregar una carta conjunta de apoyo a la acción de KCTU, condenando la ofensiva permanente contra los derechos sindicales y democráticos, y para exigir la liberación de todos los sindicalistas presos. La misión se negó a reunirse con una delegación, pero la carta fue entregada. Al unirse a los otros secretarios generales para hablar a la multitud y exigir que se ponga fin a la represión, el Secretario General de la UITA, Ron Oswald, recordó la muerte del dirigente de agricultores Baek Nam-gi [1] y la necesidad de que las autoridades se hagan cargo y asuman su responsabilidad.
Manifestación sindical en Seúl