Publicado: 26/06/2019

La UITA ha celebrado la adopción, el 21 de junio, de nuevas normas mundiales sobre la violencia y el acoso en el mundo del trabajo. La Convención y la Recomendación adoptadas en la Conferencia Internacional del Trabajo de 2019 son fruto de la constante movilización y presión de los sindicatos.

"Desde el principio, el personal y los afiliados de la UITA se organizan para presionar a los gobiernos para que apoyen el proceso y a las sociedades para que manifiesten oficialmente su apoyo. Esta victoria es la suya.", ha declarado Sue Longley, Secretario General de la UITA.

Si los representantes del patronato han intentado limitar el contenido y el alcance de estos instrumentos, muchos gobiernos han recurrido a ellos, y Rusia se ha abstenido en la votación final.

La Convención y la Recomendación reconocen el derecho de todas y todos a un mundo laboral sin violencia ni acoso, y asocian este derecho al derecho a la igualdad y a la no discriminación, subrayando así la composición sexista de la violencia y el acoso. La aplicación de estos instrumentos protege a las trabajadoras y a los trabajadores en un amplio abanico de situaciones (especialmente a los demandantes de empleo, a los trabajadores registrados por su empleador, a los trabajadores en el trabajo), y ello en todos los sectores del empleo, formal o informal. La importancia de la negociación colectiva también se ha puesto de manifiesto en la adopción y puesta en práctica de un enfoque inclusivo, integrado y que tenga en cuenta las consideraciones de género para prevenir y eliminar la violencia y el acoso en el mundo del trabajo.

Los afiliados de la UITA del sector de la hostelería aprecian en particular el hecho de que el Convenio reconozca que los trabajadores deben estar protegidos por las agencias de trabajo, incluidos los clientes, los usuarios y los prestadores de servicios. El texto precisa que los gobiernos, en consulta con los trabajadores y los empleados, deben "identificar [...] los sectores o profesiones y las modalidades de trabajo que exponen en mayor medida a los trabajadores y a otras personas afectadas a la violencia y al acoso". La Recomendación precisa que esto afecta también a las personas que trabajan en entornos aislados, como las plantaciones y los empleados de la hostelería.

Después de una lucha encarnizada, también hemos conseguido una victoria al garantizar que la Convención reconozca el impacto de la violencia doméstica en el mundo del trabajo. Estos instrumentos también requieren la adopción de medidas concretas, en particular mediante la negociación colectiva.