El Día Internacional de la Igualdad Salarial se celebra anualmente el 18 de septiembre y representa los esfuerzos constantes para lograr la igualdad de retribución por un trabajo de igual valor. Se basa en el compromiso de las Naciones Unidas con los derechos humanos y contra todas las formas de discriminación, incluida la discriminación contra las mujeres y las niñas.
La diferencia salarial entre hombres y mujeres, también conocida como brecha salarial de género, está muy extendida en todo el mundo: se calcula que las mujeres cobran entre un 20 y un 30% menos que los hombres por el mismo trabajo en un puesto similar. Los avances en la reducción de esta brecha han sido lentos, a pesar de que la igualdad salarial entre hombres y mujeres cuenta con un amplio respaldo.
Las principales razones por las que existen diferencias salariales entre hombres y mujeres son, entre otras, los estereotipos de género (como la existencia de ocupaciones "tradicionalmente masculinas" y "tradicionalmente femeninas"), la discriminación en la contratación de mujeres, especialmente si son más jóvenes, la segregación vertical y horizontal en el mercado laboral y la falta de transparencia en las políticas salariales. También se sigue considerando a las mujeres como las principales cuidadoras, siendo a menudo el progenitor que reduce su horario o abandona el lugar de trabajo para cuidar de sus hijos y parientes ancianos. La falta de guarderías universales y financiadas ha influido enormemente en el papel de la mujer en el mercado laboral y, sin duda, ha repercutido en la falta de avances en la eliminación de las diferencias salariales entre hombres y mujeres.
Si bien es fundamental comprender estas cuestiones, uno de los principales objetivos del Día Internacional de la Igualdad Salarial es fomentar nuevos esfuerzos y estrategias para lograr igual salario por igual trabajo y, dentro del Comité de Mujeres de la UITA, afirmamos que se trata de una prioridad para todos los sindicatos. Nuestro conjunto de herramientas sobre igualdad salarial lanzado este año, escrito por Jane Pillinger, es un excelente recurso para que todas las afiliadas lo utilicen en sus campañas sobre igualdad salarial. También incluye estrategias para personas trabajadoras en la economía informal y en las economías con salarios bajos.
Nuestra guía detalla las medidas destinadas a eliminar las diferencias salariales entre hombres y mujeres, que incluyen, entre otras, legislación antidiscriminatoria, campañas de sensibilización, mecanismos de política social específicos e inclusivos, control y aplicación de la igualdad salarial, superación del techo de cristal, campañas contra los estereotipos de género en la educación y el empleo y, lo que es más importante, la búsqueda dentro de nuestras propias estructuras de cómo representamos y negociamos colectivamente a trabajadores y trabajadoras.
El Día Internacional de la Igualdad Salarial nos recuerda que todo el mundo debe tener la oportunidad de alcanzar la igualdad económica, y que el empoderamiento de la mujer no debe seguir viéndose frenado por la inacción. Se trata de un derecho humano, ya que todo el mundo merece recibir una remuneración justa por el mismo trabajo, independientemente de su sexo, raza u otros factores.
¡Comprométete a formar parte de ese cambio que aún es necesario para lograr una verdadera igualdad salarial y de condiciones laborales entre hombres y mujeres!
