A raíz de las numerosas denuncias de acoso sexual y racismo en los establecimientos de McDonald's en Brasil y de la intensa campaña de la campaña Sem Direitos Não é Legal, la Comisión de Derechos Humanos del Senado brasileño celebró recientemente una audiencia pública para debatir las condiciones de trabajo de los jóvenes en las cadenas de comida rápida. Diez actuales y antiguos empleados de cadenas de comida rápida trabajadores y trabajadoras y representantes sindicales de todo Brasil dieron su testimonio junto con representantes de la campaña de comida rápida en Chile. A pesar de haber sido invitados a participar en la audiencia, los empresarios del sector de comida rápida se negaron a hacerlo.
- Como resultado de la audiencia, se enviará al gobierno brasileño un informe en el que se detalla el escandaloso acoso al que se enfrentan cada día trabajadores y trabajadoras del sector de comida rápida para su revisión
- Durante años, los trabajadores y trabajadoras del sector de comida rápida han dado testimonio de sus terribles condiciones de trabajo, con el acoso sexual descrito como endémico en el sector
- Trabajadoras y trabajadores de comida rápida de todo el mundo se reunieron en Ginebra en junio para emprender acciones públicas contra estas empresas y desarrollar estrategias para luchar por mejores condiciones en el lugar de trabajo; estas acciones siguen a una denuncia de la OCDE presentada contra McDonald’s por la UITA, la organización regional europea de la UITA EFFAT, la afiliada norteamericana de la UITA SEIU y la confederación brasileña UGT sobre la falta de protección de los trabajadores y trabajadoras contra el acoso sexual por parte de la empresa
Como declaró Weliton Carlos, antiguo trabajador de McDonald's, "no es hacer las hamburguesas lo que te agota: es el racismo y la presión laboral, así como la humillación que resulta de la forma en que nos tratan."
