La UITA ha acogido con satisfacción la adopción por el Consejo de Administración de la OIT de las directrices sobre trabajo decente para el sector agrícola. Las directrices fueron negociadas a principios de año por un equipo de personas expertas que incluía a 8 representantes de los trabajadores y trabajadoras de todas las regiones, designados por la UITA.
Aunque no son vinculantes, las Directrices extraen sus principios de las normas internacionales del trabajo y de otros documentos clave de la OIT, y especifican los principios y procesos necesarios para promover el trabajo decente en la agricultura. El Grupo Profesional de Trabajadoras y Trabajadores Agrícolas de la UITA ha elaborado un plan de trabajo para instar a gobiernos y empresas a utilizar las Directrices directamente en la agricultura y en las cadenas de suministro agrícola. Entre los puntos clave de las nuevas directrices se incluyen:
- En el sector agrícola, en el que el personal suele estar excluido de la protección de la legislación laboral o goza de niveles de protección inferiores a los de otros sectores, el reconocimiento en las directrices de que "la libertad de asociación y el reconocimiento efectivo del derecho a la negociación colectiva son derechos habilitantes que contribuyen a la promoción de la democracia, la gobernanza eficiente del trabajo" ha sido acogido favorablemente por el Grupo Profesional de Trabajadoras y Trabajadores Agrícolas (GPTA).
- Dado que los efectos de la crisis climática se dejan sentir directamente en los campos y las plantaciones, las Directrices ofrecen orientaciones útiles sobre medidas de transición justa, como la reorientación de las subvenciones y la adaptación de los incentivos fiscales a los objetivos de sostenibilidad y el apoyo a la agroecología.
- El 70% del trabajo infantil se realiza en la agricultura. Las Directrices instan a los gobiernos a abordar las causas subyacentes mediante la introducción de normativas que limiten las prácticas que fomentan el trabajo infantil, como los sistemas de salarios a destajo.
- Las Directrices cubren exhaustivamente las cuestiones de igualdad, incluido el acoso sexual, la salud y seguridad en el trabajo y la protección social.